Felicitaciones a maestra, alumnos y comunidad de la Escuela Nº85 Altos del Perdido. Transcribimos publicación editada en blog español por Alex Tripiana Berruezo Barcelona, España
Nacido el 3 de enero de 1981. Licenciado en Ciencias Ambientales por la UAB, Postgrado en Sistemas de Gestión Ambiental
"A menudo cuando se reflexiona acerca del fracaso del sistema educativo español y en parte europeo surgen los mismo argumentos. La pérdida de valores sociales como el esfuerzo, la disciplina, el respeto a la autoridad (no solo al maestro sino a los propios padres), la frustración al no ver perspectivas de futuro favorables, la falta de recursos económicos y materiales de los propios centros educativos, la incapacidad de muchos maestros para atender al diverso alumnado que hoy configura las aulas....
Tal vez sea la conjunción de todos estos factores lo que determina que las aulas hoy no sean el marco idóneo de trabajo para la educación y la formación de personas con valores.
El pasado mes de octubre, en el marco del Protocolo de Hermanamiento firmado entre la población de Cardona (Catalunya, España) y Cardona (Soriano, Uruguay) tuve la oportunidad de visitar los distintos centros educativos de la ciudad uruguaya de Cardona.
Pude visitar las instalaciones de los centros, conocer a los maestros, intercambiar palabras con los alumnos. Constaté una realidad: los problemas son similares. Pero algo importante difiere.
Una de las visitas programadas me causó una gran impresión y emoción. En compañía de la maestra Mariángeles Bugani, me desplacé hasta la Escuela Rural N 85 de los Altos del Perdido.
Se trata de una Escuela de ámbito rural, con un alumnado reducido, disperso en el territorio. El edificio donde está la Escuela es precioso, además de tener un valor histórico pues data del siglo XIX. La sencillez es el denominador común. Pero algo grande y valioso se halla allí dentro: la ilusión y el entusiasmo en un proyecto.
Dicen que creer es poder, que si lo ves en tu mente lo tendrás en tus manos. Pues eso mismo es lo que hace la excelente Mariángeles Bugani. Lucha con ilusión, entusiasmo, tenacidad, profesionalidad y humanidad para que el servicio educativo llegue a esta zona apartada de la ciudad. Trabaja con ingenio y creatividad. Poco a poco ha conseguido rehabilitar el antiguo edificio, ha dignificado su entorno. Lo muestra y explica con orgullo. Lo más curioso está en su interior. Mariángeles Bugani ha creado dentro de la Escuela un gran museo con cientos de piezas que todas ellas perfectamente contextualidas y estudiadas permiten entender la historia y el medio de los Altos del Perdido.
Lo más curioso de todo: son los propios alumnos los que estudian cada pieza y objeto nuevo que llega al museo. Lo interpretan y lo razonan. De este modo se desarrolla el Proyecto Educativo del centro: escuela - museo o lo que es lo mismo aprendizaje - experimentación.
En las sencillas aulas de la Escuela Rural - Museo N 85, los conceptos se interiorizan a través de la manipulación y por tanto visualización de los objetos. Qué gran privilegio y lujo poder aprender de este modo! Os imagináis el estudio a veces aburrido de la cultura Antigua griega y romana mediante el estudio in situ en el aula de un busto en alabastro de algún antiguo cónsul del Imperio? Sin duda el enfoque didáctico cambia totalmente la predisposición del alumno a aprender.
Sinceramente, me parece un proyecto interesantísimo que pone de manifiesto algo importante. A veces la falta de medios enconómicos, recursos pedagógicos, falta de valores sociales... no es obstáculo para ejercer la docencia con dignidad y eficacia. Tal vez lo que falte a menudo sea ilusión, estusiamos, creer en lo que haces y amarlo. Mariángeles Bugani es el vivo ejemplo de lo que yo entiendo por Maestra. Nuestra sociedad está tan faltada de Mariángeles que ojalá su labor se contagie y sirva de modelo.
El reconocimiento
La Escuela Rural N 85 de los Altos del Perdido, ubicada en la zona rural cercana a la ciudad de Cardona y en el límite con el departamento de Flores es un ejemplo extraordinario de integración social, educación productiva y eficiente, fomento de la cultura, recuperación del patrimonio histórico y trabajo de los valores más lícitos y nobles del ser humano.
La Escuela en realidad es un excelente Museo. Gracias al empeño y dedicación de sus maestros, a lo largo del tiempo ha conseguido reunir más de mil piezas arqueológicas inventariadas, lo que manifiesta la evolución que ha tenido la zona a través del tiempo. Es pues, una Escuela Museo de características únicas en el país.
Esto se ha conseguido, gracias al trabajo tenaz y perseverante de los maestros de la Escuela y lo más interesante es que ha contado con la participación de los propios alumnos de la Escuela.
A través de las diferentes investigaciones históricas que constituyen el museo, los escolares trabajan todo el contenido programático. Es decir, a partir de cada objeto que hallan, lo catalogan, estudian y lo más importante son capaces de entender el contexto en el que se encuentra. Aprenden conociendo la propia realidad. Es una estrategia didáctica extraordinaria, innovadora y digna de admiración.
Pasar un día en la Escuela Rural – Museo N 85 realmente no deja indiferente. Emociona ver la tarea que desempeña Mariángeles Bugani, maestra e impulsora del Proyecto actual.
Enorgullece ver a los alumnos ilusionados con cada objeto que encuentran, catalogan y luego exhiben con orgullo en las salas del museo. Es estimulante ver como las generaciones más jóvenes se implican en el respeto, conocimiento y valorización de nuestro patrimonio. Lo conocen mejor que nadie, pues viven con él cada día.
El reconocimiento a la Escuela Rural Museo N 85 de los Altos del Perdido, es un reconocimiento justo, lícito y necesario. Vale la pena reconocer la labor que desempeñan las personas que aman el patrimonio, lo conservan, lo estudian y lo más importante lo divulgan y lo hacen llegar al resto de la comunidad.
Esperemos que este reconocimiento sirva de estímulo y ayuda para que este proyecto educativo tan noble y positivo avance y vaya a más. Para que contagie a los más jóvenes y al resto de la ciudadanía.
Un país es realmente digno, cuando conserva, protege y ama su patrimonio y su tierra. Sin lugar a dudas la Escuela que hoy homenajeamos contribuye a que Soriano y Uruguay sean todavía más dignos."
Nacido el 3 de enero de 1981. Licenciado en Ciencias Ambientales por la UAB, Postgrado en Sistemas de Gestión Ambiental
"A menudo cuando se reflexiona acerca del fracaso del sistema educativo español y en parte europeo surgen los mismo argumentos. La pérdida de valores sociales como el esfuerzo, la disciplina, el respeto a la autoridad (no solo al maestro sino a los propios padres), la frustración al no ver perspectivas de futuro favorables, la falta de recursos económicos y materiales de los propios centros educativos, la incapacidad de muchos maestros para atender al diverso alumnado que hoy configura las aulas....
Tal vez sea la conjunción de todos estos factores lo que determina que las aulas hoy no sean el marco idóneo de trabajo para la educación y la formación de personas con valores.
El pasado mes de octubre, en el marco del Protocolo de Hermanamiento firmado entre la población de Cardona (Catalunya, España) y Cardona (Soriano, Uruguay) tuve la oportunidad de visitar los distintos centros educativos de la ciudad uruguaya de Cardona.
Pude visitar las instalaciones de los centros, conocer a los maestros, intercambiar palabras con los alumnos. Constaté una realidad: los problemas son similares. Pero algo importante difiere.
Una de las visitas programadas me causó una gran impresión y emoción. En compañía de la maestra Mariángeles Bugani, me desplacé hasta la Escuela Rural N 85 de los Altos del Perdido.
Se trata de una Escuela de ámbito rural, con un alumnado reducido, disperso en el territorio. El edificio donde está la Escuela es precioso, además de tener un valor histórico pues data del siglo XIX. La sencillez es el denominador común. Pero algo grande y valioso se halla allí dentro: la ilusión y el entusiasmo en un proyecto.
Dicen que creer es poder, que si lo ves en tu mente lo tendrás en tus manos. Pues eso mismo es lo que hace la excelente Mariángeles Bugani. Lucha con ilusión, entusiasmo, tenacidad, profesionalidad y humanidad para que el servicio educativo llegue a esta zona apartada de la ciudad. Trabaja con ingenio y creatividad. Poco a poco ha conseguido rehabilitar el antiguo edificio, ha dignificado su entorno. Lo muestra y explica con orgullo. Lo más curioso está en su interior. Mariángeles Bugani ha creado dentro de la Escuela un gran museo con cientos de piezas que todas ellas perfectamente contextualidas y estudiadas permiten entender la historia y el medio de los Altos del Perdido.
Lo más curioso de todo: son los propios alumnos los que estudian cada pieza y objeto nuevo que llega al museo. Lo interpretan y lo razonan. De este modo se desarrolla el Proyecto Educativo del centro: escuela - museo o lo que es lo mismo aprendizaje - experimentación.
En las sencillas aulas de la Escuela Rural - Museo N 85, los conceptos se interiorizan a través de la manipulación y por tanto visualización de los objetos. Qué gran privilegio y lujo poder aprender de este modo! Os imagináis el estudio a veces aburrido de la cultura Antigua griega y romana mediante el estudio in situ en el aula de un busto en alabastro de algún antiguo cónsul del Imperio? Sin duda el enfoque didáctico cambia totalmente la predisposición del alumno a aprender.
Sinceramente, me parece un proyecto interesantísimo que pone de manifiesto algo importante. A veces la falta de medios enconómicos, recursos pedagógicos, falta de valores sociales... no es obstáculo para ejercer la docencia con dignidad y eficacia. Tal vez lo que falte a menudo sea ilusión, estusiamos, creer en lo que haces y amarlo. Mariángeles Bugani es el vivo ejemplo de lo que yo entiendo por Maestra. Nuestra sociedad está tan faltada de Mariángeles que ojalá su labor se contagie y sirva de modelo.
El reconocimiento
La Escuela Rural N 85 de los Altos del Perdido, ubicada en la zona rural cercana a la ciudad de Cardona y en el límite con el departamento de Flores es un ejemplo extraordinario de integración social, educación productiva y eficiente, fomento de la cultura, recuperación del patrimonio histórico y trabajo de los valores más lícitos y nobles del ser humano.
La Escuela en realidad es un excelente Museo. Gracias al empeño y dedicación de sus maestros, a lo largo del tiempo ha conseguido reunir más de mil piezas arqueológicas inventariadas, lo que manifiesta la evolución que ha tenido la zona a través del tiempo. Es pues, una Escuela Museo de características únicas en el país.
Esto se ha conseguido, gracias al trabajo tenaz y perseverante de los maestros de la Escuela y lo más interesante es que ha contado con la participación de los propios alumnos de la Escuela.
A través de las diferentes investigaciones históricas que constituyen el museo, los escolares trabajan todo el contenido programático. Es decir, a partir de cada objeto que hallan, lo catalogan, estudian y lo más importante son capaces de entender el contexto en el que se encuentra. Aprenden conociendo la propia realidad. Es una estrategia didáctica extraordinaria, innovadora y digna de admiración.
Pasar un día en la Escuela Rural – Museo N 85 realmente no deja indiferente. Emociona ver la tarea que desempeña Mariángeles Bugani, maestra e impulsora del Proyecto actual.
Enorgullece ver a los alumnos ilusionados con cada objeto que encuentran, catalogan y luego exhiben con orgullo en las salas del museo. Es estimulante ver como las generaciones más jóvenes se implican en el respeto, conocimiento y valorización de nuestro patrimonio. Lo conocen mejor que nadie, pues viven con él cada día.
El reconocimiento a la Escuela Rural Museo N 85 de los Altos del Perdido, es un reconocimiento justo, lícito y necesario. Vale la pena reconocer la labor que desempeñan las personas que aman el patrimonio, lo conservan, lo estudian y lo más importante lo divulgan y lo hacen llegar al resto de la comunidad.
Esperemos que este reconocimiento sirva de estímulo y ayuda para que este proyecto educativo tan noble y positivo avance y vaya a más. Para que contagie a los más jóvenes y al resto de la ciudadanía.
Un país es realmente digno, cuando conserva, protege y ama su patrimonio y su tierra. Sin lugar a dudas la Escuela que hoy homenajeamos contribuye a que Soriano y Uruguay sean todavía más dignos."
¡Excelente entrada! ¡Felicitaciones, una vez más, a Mariángeles y sus alumnos!
ResponderEliminar